La astenia primaveral surge debido a una reacción corporal ante los cambios de luz y temperatura que están relacionados con el cambio horario que se produce con la llegada de esta estación del año. Este trastorno se manifiesta con síntomas como el cansancio, la apatía, la fatiga a la hora de realizar tareas, la irritabilidad, la somnolencia, falta de apetito y deseo sexual y malestar general.

 

 astenia primaveral

 

 

 

 

 

Estos síntomas pueden durar algunos días o semanas, hasta que nuestro cuerpo se acostumbre y vuelva a su ritmo normal, pero en el caso de que se prolonguen por demasiado tiempo es necesario consultar a un médico especialista con el fin de determinar si se trata de otra condición.

 1-Una clave importante para combatir la astenia primaveral es dormir un mínimo de 8 horas diarias

2-Del mismo modo, será fundamental que cuides tu alimentación para minimizar los efectos de la astenia primaveral sobre tu organismo. Será indispensable que incluyas en tu dieta carbohidratos que te aporten grandes dosis de energía, así como frutas y verduras que garanticen la ingesta de vitaminas y minerales para mantener el sistema inmunológico en pleno rendimiento. También será fundamental que mantengas tu cuerpo hidratado, por lo que deberás beber grandes cantidades de líquidos: agua, zumos, bebidas no carbonatas, etc.

 3-Por otro lado, los ejercicios de relajación como el yoga y el pilates pueden ayudarte a que tu cuerpo reciba mucho mejor el cambio climático de la estación. Además, practicar alguna actividad cardiovascular te favorecerá a conciliar el sueño y disminuir el estrés.

4-Al mismo tiempo, deberás evitar las sustancias estimulantes como el café y el resto de alimentos con cafeína, las bebidas excitantes o el tabaco.

 5-También algunas raíces de plantas como el jengibre o el ginseng son de gran utilidad para mejorar el esto de ánimo y aportar vitalidad. Las infusiones de estos productos naturales pueden ser muy apropiadas a la hora de combatir la astenia primaveral.

 Si no sientes ningún tipo de mejoría o tus síntomas se acrecientan, lo mejor es que consultes a tu médico.