Lifting

LIFTING

El lifting o estiramiento facial es una de las intervenciones para mejorar los signos visibles de envejecimiento en la cara y en el cuello (lifting frontal y lifting cervico facial.)
Es un tratamiento espectacular, ya que el rostro queda sensiblemente rejuvenecido, y, es por ello una de las intervenciones más populares en la cirugía estética de personas mayores de cuarenta años.

Técnicas empleadas
Los liftings deben ser individualizados, cada caso puede variar en cuanto a la colocación y extensión de las incisiones, las zonas de la cara que se quieren mejorar, el uso o no de técnicas complementarias (Cirugía de parpados, pómulos…) y la duración de la intervención. Habitualmente la incisión comienza en la zona de las sienes (por dentro del pelo) se extiende por entre las lineas naturales por delante de la oreja y continua detrás de la oreja y cuero cabelludo. Cuando el cuello necesita también una mejora es necesario hacer una incisión por debajo del mentón. Una vez concluida la intervención las heridas se cerraran con puntos dejando temporalmente unos pequeños drenajes bajo la piel y se colocará un vendaje.

Recuperación
El postoperatorio no suele ser doloroso. Las molestias generalmente suelen controlarse bien con analgésicos habituales. El vendaje y los drenajes, se retirarán en las 24/48 horas posteriores.
Los primeros puntos se retirarán aproximadamente en una semana y el resto a valorar por el cirujano, un poco más tarde.
Es normal que sienta la cara una sensación de “acolchamiento”, esta sensación es temporal y transitoria y desaparece en unas cuantas semanas. Es habitual que la cara esté inflamada y presente moraduras, este aspecto, durará de diez a quince días si sigue las instrucciones de su cirujano.
Durante las dos primeras semanas repose todo lo que pueda, a partir de la tercera semana su aspecto será mucho mejor y las cicatrices serán casi imperceptibles.

Riesgos
Como en cualquier intervención quirúrgica existe un riesgo de complicaciones o una reacción anormal a la anestesia.
El sangrado excesivo o la presencia de grandes hematomas, ocurren generalmente en casos en los que el paciente toma o ha tomado determinados tipos de medicación antes de la intervención como la aspirina.
Si es Vd. fumador, es muy aconsejable que reduzca drásticamente la cantidad de cigarrillos o deje de fumar unas semanas antes y después de la intervención. El tabaco contribuye a una mala cicatrización y circulación sanguínea, aumentando la posibilidad de complicaciones.